sábado, febrero 11, 2012

Periodismo de investigación "neocon"

En el enlace, el Boletín Estadístico del Personal al Servicio de las AAPP en Julio de 2010. En números redondos: 2,6 millones de trabajadores al servicio del Estado, en sus distintas formas. De ellos, un 60% son funcionarios de carrera: 1,56 millones de trabajadores. En el boletín estadístico falta el personal al servicio de los entes públicos de las CCAA (que se cifran en unos 400 mil).

En el enlace, Noticia de expansión sugiriendo el despido de 2,2 millones de funcionarios para que el Estado pague su deuda.

Pido perdón, de antemano, por la escatología. Estoy hasta los cojones de este tipo de medios, de este tipo de opiniones malintencionadas, simplonas, que rezuman tanta mala uva que da miedo. Estoy hasta los cojones de que la prensa "neocon" haya, con éxito, encontrado el chivo expiatorio para esta crisis: los funcionarios. Estoy hasta la coronilla del nivel de analfabetismo del "pobre" ciudadano medio que desconoce que el grueso de los funcionarios de carrera (más del 70%) lo forman gente tan prescindible como médicos, profesores y policías. Y estoy también hasta la coronilla del desprecio a los demás funcionarios que se dedican a tareas burocráticas, totalmente necesarias. Se ve que trabajar de administrativo en una empresa privada es súperdigno, ahora, hacerlo para el Estado es poco menos que una vergüenza. Y, sobre todo, estoy hasta los cojones de que se hable de enchufados en empresas públicas, que seguro que los habrá, cuando yo conozco a decenas de empleados en este tipo de empresas que no conocían ni al gato (esto es, no tenían enchufe) y que entraron y se mantuvieron en sus puestos por su propio mérito. Hasta los cojones. Ah, y lo digo bien alto: prefiero mil veces que me vuelvan a rebajar el sueldo y repartir con mis compañeros no funcionarios de carrera antes de que echen a ni una sola persona más a la calle. Lo que haga falta. A ver si en el mercado privado cunde el ejemplo y dejamos ya de apuntar siempre al mismo sitio, que parece que esta crisis """sólo""" afecta a parados (en primer lugar), empleados públicos y pensionistas. Aunque creo que si hay alguien con alguna mínima duda de que la crisis es de TODOS los trabajadores después de la reforma laboral del gobierno es que, directamente, es gilipollas.

Ah, y no termino este post visceral sin antes proponer una contramedida a la mierda que ha publicado expansión: propongo que el Estado se apropie de 100 millones de € de cada multimillonario español con un patrimonio superior a 1.000 millones de €. Es sólo un 10%, ¿no es tanto, no?

Ahí queda eso.

6 comentarios:

Gandalf dijo...

¿Cómo cambiamos ésto Chisco?

Los españoles, en general son muy de echar cuentas a corto plazo y las cuentas que les salen son: el gobierno necesita dinero, mejor que no me lo quite a mi.

Y ya está, hasta ahí llegamos. Y que puedo hacer para que no me lo quite a mi, defraudar y apoyar las medidas que le saquen los cuartos a otros.

Y ésos son nuestros compatriotas.

El cuerpo de funcionarios necesita un lavado de cara, por un lado es necesario que a todos los que se aprovechan de su posición corruptamente se los eche a la calle y después, hacer una campaña para mejorar su imagen, porque mientras siga habiendo uno sólo que de mala imagen al cuerpo nadie os va a reconocer nada.

Cuantos conocemos a ése médico del estado que tiene una consulta privada pero que te manda hacer una radiografía en el sistema público colándote... o a ésa persona que conoce a alguien en la ITV o en la policía...

Nuestra sociedad está corrupta hasta un punto en el que ya no se distingue la corrupción porque siempre hay alguien peor, que hace cosas peores o igual de malas para usarlo como muletilla.

Me da mucha pena por todos los funcionarios honrados... pero parte de su responsabilidad como trabajadores honrados es también denunciar al compañero corrupto, porque sino están siendo cómplices.

Gandalf dijo...

No digo que ésa corrupción no exista en el sector privado, pero lo cierto es que en el sector privado el jefe persigue al vago y normalmente acaba espabilando o en la calle y si no le pillan, al menos no le están pagando con el dinero de impuestos que todos nosotros pagamos, incluidos los funcionarios que a veces a la gente se les olvida que tb pagan impuestos...

Chisco dijo...

Saludos, Gandalf.

Creo que estamos de acuerdo en que la factura de la crisis no se está repartiendo de forma equitativa. Pero puestos a repartir de esta forma injusta, acepto que a los funcionarios nos toque más parte en el reparto. De hecho ya nos ha tocado: rebaja 5% de media más congelación 2 años (por ahora). Ojo: acepto que nos toque a los funcionarios de carrera. No acepto que le toque, por ejemplo, a todos los empleados públicos. Casi un 50% de ellos no son funcionarios de carrera. Son despedibles en cualquier momento. De hoy para mañana. Y muchos de ellos sin indemnización (ni 33 días, ni 20 días ni monsergas). El índice de precariedad en el sector público, aunque parezca mentira, es muy alto. Tampoco acepto que todos paguemos por igual en función del nivel que tengamos en el escalafón público: el esfuerzo que puedo realizar yo no es el mismo que el que puede realizar, por ejemplo, un padre de familia.

Sobre el lavado de cara, vale, puedo aceptarlo también. Pero la cara no está tan sucia como parece. Eso no lo acepto. De ensuciarla más de la cuenta se han ocupado este tipo de medios. La Sanidad puede ser un GRAN negocio y no quiero que lo sea. La Educación puede ser un GRAN negocio y no quiero que lo sea, y así con muchas cosas más. Llevo tres años en la función pública y la gente que he visto, en general, responde. Cuando hablas de corrupción y fraude, entiendo perfectamente que en un servidor público es MUCHO más grave que en cualquier otro ciudadano, porque representa al Estado. Pero, cuidado, al final es la mano de un político la que, en la mayoría de los casos, realiza el desfalco. Son los políticos los que firman obras millonarias. Son ellos los que firman contratos millonarios con el dinero de todos. Y esto no es el chocolate del loro. Miles de millones de €, y vete a saber cuántos cientos en comisiones y robos directos. No puedes comparar ese fraude con eso otro que, aunque también es un fraude, no lo es en la misma medida. Me refiero a lo de la ITV, la multa que te perdona el policía, etc. No es lo mismo. Además, quiero creer que ésto último es minoritario. Estoy seguro de que la corrupción no es un mal del funcionariado español. Sí que lo es del político.

No pretendo que nadie me reconozca nada, esta entrada es, sobre todo, una forma de desahogarme. Sé que es parte del peaje a pagar por ser funcionario. Es sólo que necesitaba desahogarme en mi espacio. No entiendo que la gente tache a los médicos de sobrepagados o de privilegiados. No lo entiendo. No entiendo que ahora vean a los profes como unos privilegiados: si supieran cómo son sus "hijitos" dentro de las aulas seguro que cambiaban de idea. No entiendo que desprecien al administrativo de turno. O sí, sí que lo entiendo. Lo entiendo por ese cainismo español de contentarse tratando de que al otro le vaya peor que a uno mismo, así sí que lo entiendo. Aunque no quiera entenderlo ..

KD dijo...

Yo soy actualmente uno de esos "otros" empleados públicos, de los que se pueden ir a la calle de un día para otro, sin ningún tipo de indemnización después de casi nueve años de servicio. Pensaba que por ahora iba a tener suerte, por eso de que no se van a convocar oposiciones próximamente, pero visto como les están metiendo mano a los interinos en otras CCAA, ya me espero cualquier cosa.

Como te podrás imaginar, en nueve años he visto de todo, he visto funcionarios de carrera e interinos que se parten el espinazo; he visto funcionarios de carrera e interinos que se tocan las pelotas; he visto grandes trabajadores de empresas públicas y privadas que trabajan con nosotros, y otros tan haraganes como el más perro de los funcionarios... Así que lo único que puedo decir es que es un debate complicado...

Soy defensor a ultranza de lo público (además los dos me conoceis y sabéis que mi pensamiento se ha ido "izquierdizando" en los últimos años). Coincido con Gandalf en que la corrupción y las malas prácticas campan bastante a sus anchas (en lo público y en lo privado), por lo que entiendo que, en lo que a la Administración se refiere, hace falta un buen lavado de cara (tambien en lo privado, pero el ente público debe responder antes los contribuyentes). Sin embargo, me alineo contigo en el sentido de que el mal mayor no está en los trabajadores públicos de base. Es algo que alcanza de forma más severa en las altas cotas políticas y desde luego en las cúpulas empresariales y financieras (que por ende son los que menos van a pagar su propia fiesta). No creo que la solución pase por machacar todavía más a trabajadores cada vez más quemados y desmotivados, porque así desde luego no vas a conseguir una administración más eficaz y eficiente. Los funcionarios deben responder ante los contribuyentes, desde luego, pero no creo que el camino sean las bajadas de sueldo, el recorte de derechos y las cribas indiscriminadas.

Gandalf dijo...

Sólo puedo decir que estoy de acuerdo con vosotros en lo que a injusticias y mezquindades se refiere.

Por desgracia cuando la mayoría habla de funcionarios se refiere a los administrativos con los que tiene que tratar cuando necesita hacer alguna gestión. Nadie suele acordarse del personal educativo y sanitario. Además cuando a alguien le atienden correctamente, nadie charla de ello animadamente, pero cuando a alguien le atienden mal o no le cogen el teléfono después de llamar durante una hora, descuida que lo va a pregonar a los cuatro vientos.

Sobre las corrupciones, claro que las hay malas y peores. Pero son todas corrupciones, colar a alguien es utilizar tu capacidad de decisión, un poder que debes usar con responsabilidad para beneficio de todos, para favorecer a otro o a ti mismo Y PERJUDICAR A OTRO, mucho o poco. Un político hace lo mismo, pero su responsabilidad es mayor y por tanto su poder mayor y su capacidad de hacer males es de hacer males mas gordos.

Volviendo al tema del lavado de cara te pongo el siguiente ejemplo:
Pepito se parte el espinazo trabajando, pero no llega nunca menos de 5 minutos tarde de su hora de entrada.
Cada vez que a Pepito alguien le llama la atención el se llena la boca de decir que allí trabaja más que nadie.. etc etc, pero siempre le dicen ¿Si tanto trabajas como es que no eres capaz de llegar a la hora que debes ningún día?

Mucho me temo que mientras 'algunos lleguen tarde', o salgan al mercadillo, o a tomarse un cafe de una hora, por pocos que sean, por muy duro que trabajen ésos y otros... se lo están poniendo en bandeja para que les echen mierda a todo el funcionariado.

En general la gente da asco y aquí me vais a dejar que me excluya, si todos se preocupasen más de hacer su trabajo lo mejor posible para aislar e ignorar al que no hace el suyo, a todos nos iría mucho mejor. Pero aqui alabamos al 'listo' que no da ni golpe hasta que es compañero nuestro, momento en que se convertirá en fuente de desmotivación y en escudo para defensa de que nuestra propia ineficacia, no es tan grande como la del 'listo'....

Y volviendo al comienzo... ¿Como lo resolvemos?

KD dijo...

De acuerdo en casi todo. Aunque tengo una objeción, la desmotivación seguramente es utilizada por alguna gente como excusa para encubrir su propia ineficacia. Aunque para otros la desmotivación no es una excusa es un hecho inevitable. Tengo compañeros que no son para nada ineficaces, y sin embargo están completamente desmotivados (hablo de compañeros porque yo no se si soy o no eficaz, creo que sí, al menos lo intento, aunque desde luego algunos días estoy bastante desmotivado...). Ya hemos hablado muchas veces de como se trabaja aquí y de lo jodido que es ver como clientes y jefecillos se dan palmaditas en la espalda y se van a celebrar con unas cervezas el trabajo bien hecho..., por otro.

En lo del tío currante de verdad, pero que sistemáticamente llega tarde, tengo sentimientos encontrados. Ya sabes lo que pienso sobre medir el rendimiento en función del tiempo que estás sentado delante del ordenador. Sin embargo es cierto que si hay un horario -por improductivo que nos parezca- hay que respetarlo. El tío que llega un poco tarde pero curra y cumple sus objetivos en tiempo y forma para mi tiene un pase, la señora que se pasa su jornada en el mercadillo me jode un poco más (hay un "ligero" matiz)...

Por desgracia, en lo de aplaudir al "listo" que no da ni golpe tienes toda la razón, también lo he visto, como he visto reirse a algunas personas de otro compañero que envía -sin tener que hacerlo- correos explicando funciones, algoritmos, metodologías de optimización y cosas así. Igual que he tenido que escuchar las chanzas y comentarios del estilo "mira el puto listo" simplemente cuando lees algo y pronuncias en un inglés correcto... Y no es solo un mal de funcionarios, somos así de tontos al mesurar el talento.

En cuanto a la respuesta a tu pregunta ¿Cómo lo resolvemos? Tú mismo das la respuesta: haciendo nuestro trabajo tan bien como nos sea posible soportando, añadiría yo, la desmotivación y la injusticia lo mejor que podamos, con la esperanza de que las cosas cambien.