martes, febrero 15, 2011
domingo, febrero 13, 2011
jueves, febrero 10, 2011
Esclavos de nuestras palabras
Hay dos que para mí son básicas. La primera, el abandono definitivo de la violencia (…) La segunda, que acepten de forma clara e inequívoca los procedimientos democráticos, cuya primera expresión son las elecciones del 25 de octubre en el País Vasco. No estoy pidiendo, y podría hacerlo, que asuman todos los pronunciamientos electorales que ha habido en estos veinte años, ni siquiera que hagan explícita condena de sus propios crímenes, pero sí que acepten las reglas democráticas desde el momento en que anunciaron el cese de la violencia.
José María Aznar. 1998(leído en Escolar)
Maldita la gracia que me hace que un partido defienda abiertamente la separación de un territorio que considero de España. Pero si, como dicen, rechazan todo tipo de violencia, especialmente la de ETA (palabras textuales del comunicado de SORTU), y aceptan las reglas democráticas, como también han manifestado ... ¿qué pega les podemos poner?
sábado, febrero 05, 2011
Bienvenida, Frau Merkel
Estimada canciller de la no menos querida Alemania. He escuchado con toda la atención que merece la voz del amo su propuesta de ligar la subida de los salarios a los beneficios empresariales. Entiendo su obsesión con la inflación; no es para menos siendo usted la líder de un país que hace no tanto tuvo que imprimir billetes de 200 millones de marcos por una sola cara. Pero si de verdad pretende recetarnos el modelo chino a la alemana, y que la competitividad mejore a costa de recortar aún más el poder adquisitivo de los trabajadores españoles, le aconsejo que repase muy bien las grandes cifras, no vaya a ser que su genial idea salga rana.
A falta de conocer todos los datos anuales, las empresas del Ibex 35 ganaron en los nueve primeros meses de 2010, en el peor infierno de la peor crisis, un 16,7% más que en el mismo periodo de 2009. Repito: un 16,7% más de beneficios en un año en el que los salarios subieron, de media, un 1% (y la inflación, un 3%). Los beneficios de Telefónica crecieron un 65,6%. Los de Repsol, un 32,5%. Los de Inditex, un 42%. Los del BBVA –que ya ha cerrado el año– un 9,4%. Hable con los presidentes de estas empresas, señora Merkel, que usted tiene mucha mano. Hable con ellos, a ver si puede convencer al señor César Alierta, al señor Amancio Ortega o al señor Francisco González para que suban el sueldo a sus trabajadores en idénticos porcentajes.
Si esto pasa en plena crisis, ¡imagine cuando acaben las vacas flacas! Dos datos de la OCDE: entre 1995 y 2005, el salario medio real de los españoles perdió un 4% de poder adquisitivo; entre 1999 y 2006, los beneficios empresariales crecieron un 73%. ¿Entiende ahora, señora Merkel, por qué el vicepresidente de la patronal Arturo Fernández ha respondido que su propuesta es “demasiado radical” para España?
domingo, enero 16, 2011
Miro hacia atrás en busca de mis recuerdos
Leed el artículo de "El País" sobre los "mileuristas", no tiene desperdicio.
El Domingo volví a Herrera de Alcántara. Hacía 20 años, desde que salimos del pueblo buscando otro destino, que no lo visitaba. Mi recuerdo, a pesar de estos 20 años, siempre permaneció nítido y puro.
Qué sensación, dios mío, al entrar por la vieja carretera jalonada por 2 enormes tinajas, las mismas tinajas de entonces. Qué emoción al ver el mismo paseo poblado por unos pocos bancos de hierro forjado, los mismos bancos de entonces. Qué bullir, qué sorpresa, qué cosquilleo celular al llegar a la explanada con la vieja escuela, el ayuntamiento, las casas de los maestros ... la misma escuela, el mismo ayuntamiento, las mismas casas. Caminé calle abajo y vi mi casa. Mi casa. Exactamente igual a como yo la recordaba, el mismo patio, el pozo al pie del naranjo, los nidos de golondrina en el ángulo de las cornisas, el kiosko a unos pocos metros, la tienda de golosinas, la calle por la que correteaba con mis amigos, las ventanas por las que asomaban nuestras madres a llamarnos cuando caía la noche... todo igual a como yo lo recordaba. A unos 50 metros de mi casa, el estanco; un poco más abajo, la torre del reloj y a su lado el bar de Puri; junto a la Iglesia, la tienda de golosinas de la anciana "María Carrera" ... nada había cambiado.
Recordé el día en el que le pedí a mi hermano que me quitara los patines de la bicicleta, porque ya no los apoyaba en el suelo. Recordé cómo me gritaba que tuviera cuidado cuando salí zumbando con la bici cuando desatornilló los patines. Recordé el día en que mi madre y yo saltamos la valla de entrada a nuestra casa porque habíamos olvidado la llave de la puerta. Recordé los gustanitos de naranjito de a 5 pesetas, los helados de menta de a 15, los palotes y los peta-zetas.
Me emocioné como hacía tiempo que no lo hacía, y dí gracias al responsable de esta vida por haberme regalado esos momentos tan felices. Recordé que, a pesar de todo y aunque sólo sea por la infancia, el mejor de los regalos, digo que recordé ... ¡qué bello es vivir!
miércoles, diciembre 15, 2010
Portada en el mundo sobre funcionarios
Irónico, cuanto menos. Estoy seguro de que al menos un 80% de los funcionarios se están echando unas buenas risas.
lunes, diciembre 13, 2010
Los prescindibles
Relato de la manifestación de estudiantes en Londres, por la subida de las tasas universitarias un 300%
martes, diciembre 07, 2010
Flashmobs
lunes, noviembre 29, 2010
Algunas previsiones económicas
Los niveles actuales de rentabilidad en la deuda española son insostenibles. Así de claro. O el BCE realiza una compra masiva de bonos españoles y del resto de países periféricos a corto plazo (esta semana o la próxima), o llegaremos a un punto de no retorno antes de lo que pensábamos. Atentos a la prensa en estos días.
lunes, noviembre 22, 2010
martes, octubre 26, 2010
Una de zombies
Dead Set es una de las mejores creaciones sobre zombies que he visto. A la altura de 28 días y 28 semanas después. Es una miniserie de 5 capítulos. La acción comienza en el set de grabación del Gran Hermano inglés. A partir de ahí, ya os podéis hacer una idea de lo que ocurre...
miércoles, octubre 20, 2010
Otra música en el parlamento
Respuesta de IU al plan de reducción del déficit de Zapatero
La eterna víctima
Ana Pastor en TVE
sábado, octubre 16, 2010
viernes, octubre 15, 2010
lunes, octubre 04, 2010
No llevan maletas de cartón
Hasta hace poco era un privilegio de los nuevos tiempos que les permitía gozar de una libertad sin límites, de un mundo sin fronteras, de una capacidad casi infinita de aprendizaje... Hasta que llegó la crisis y la maleta pareció distinta, la espera en la fila de embarque más embarazosa, la despedida más triste y el fantasma de la ausencia definitiva más cercano.
No. No llevan maletas de cartón, ni hay aglomeraciones en el andén de la despedida. No se marchan en grupo, sino uno a uno. Aparentemente nada les obliga. Ha sido una cadena invisible de acontecimientos. Estuvieron allí hace unos años, o tienen una amiga que les ha informado de que puede encontrar algún trabajo con facilidad. No pagarán mucho, eso es seguro, pero podrán ganarse la vida con cierta facilidad... A fin de cuentas aquí no hay nada.
Y se marchan poco a poco, sin alboroto alguno. Un goteo incesante de savia nueva que sale sin ruido de nuestro país, desmintiendo la vieja quimera de que la historia es un caudal continuo de mejoras.
No hay estadísticas oficiales sobre ellos. Nadie sabe cuántos son ni adonde se dirigen. No se agrupan bajo el nombre oficial de emigrantes. Son, más bien, una microhistoria que se cuenta entre amigos y familiares. "Mi hija está en Berlín", "se ha marchado a Montpellier", "se fue a Dubai" son frases que escuchamos sin reparar en el significado exacto que comportan. Escapan a las estadísticas de la emigración porque suelen tener un nivel alto de estudios y no se corresponden con el perfil típico de lo que pensamos que es un emigrante. Quizá en las cuentas oficiales figuren como residentes en el extranjero, pero deberían aparecer como nuevos exiliados producto de la ceguera de nuestro país.
En los tiempos de crisis que detallan cada euro gastado nadie computa los centenares de miles de euros empleados en su formación y regalados a empresarios de más allá de nuestras fronteras con una torpeza sin límites, con una ignorancia sin parangón. Menos aún se cuantifican el esfuerzo de sus familias, las ilusiones perdidas y sus sueños rotos en mil pedazos.
No llevan maletas de cartón, pero componen un nuevo éxodo que azota especialmente a Andalucía, que dispersa a nuestros jóvenes por toda Europa y gran parte del mundo, que nos priva de su saber, de su aportación y de su compañía. Pero, aparentemente nadie se escandaliza por esta fuga de cerebros, lenta pero inexorable, que nos privará de muchos de nuestros mejores talentos. Nadie protesta por esta nueva oleada de exiliados que son una acusación silenciosa del fracaso y de engaño. Se van en silencio por el túnel de embarque en el que les alcanzará la melancolía por la pérdida temprana de su tierra.
No son, como dicen, una generación perdida para ellos mismos. No son los socorridos ni-nis que sirven para culpar a la juventud de su falta de empleo. Son una generación perdida para nuestro país y para nuestro futuro. Un tremendo error que pagaremos muy caro en forma de atraso, de empobrecimiento intelectual y técnico. Aunque todavía no lo sepamos.
Leído en el pais
Conozco a muchos de ésos que han salido de España sin maletas de cartón, buscando labrarse un futuro mejor del que aquí les ofrecían. "Mano de obra" muy cualificada, y que va a crear valor y mostrar su talento a otros países. Mientras aquí, en España, nuestros políticos y muchos empresarios sigan convencidos de que los sueldos que se nos pagan son demasiado altos, el goteo continuará incesante. No me valen historias de productividad, porque en su gran mayoría no son ciertas. Sobre todo cuando se miden en tiempo, que es la peor medida de la productividad. Conozco pocos trabajos más productivos (o más potencialmente productivo) que los técnicos, que es el mundo del que procedo. Pero eso no importa. En españa todo el mundo cobra demasiado. Café para todos. Solo que esta vez no es café, es una hondonada de hostias.
viernes, septiembre 10, 2010
Una reflexión sobre los sindicatos
Sí, puede que sean nidos de vagos que piden bajas en sus centros de trabajo para luego no dar palo al agua en el supuesto servicio que deberían ofrecer a sus representados (al menos en la función pública ocurre así: son famosas las "bajas sindicales", que consisten en que un funcionario deja su puesto de trabajo para hacer labores sindicales, siendo ocupado el puesto vacante por otro interino). Sí, muchos son pesebreros de los gobiernos de izquierdas y reaccionan de forma virulenta ante cualquier medida que pueda tomar uno de derechas (si estuviera gobernando el PP, ya habrían ardido varias ciudades españolas). Sí, hay que mejorar muchas cosas de los sindicatos, pero es vital defender la función que tienen de defender los derechos de los trabajadores. Y cada vez me gusta menos la campaña de desprestigio que están sufriendo. Cada vez me gusta menos oír a "currantes" decir que los sindicatos (TODOS) no valen para nada. No me gusta nada.
miércoles, agosto 25, 2010
Diccionario neolib (o neocon)
2. Reforma laboral: bajar salarios
3. Reforma fiscal: bajar o eliminar las contribuciones empresariales a la SS, bajar las contribuciones de las rentas del capital, (polit.) bajar los impuestos al amigo que financia mi partido.
4. Reforma de las pensiones: bajar las pensiones.
(Nótese el veradero sentido de la palabra reformar = introducir cambios que mejoren la situación de los que ya están en muy buena situación)
5. Invertir: (polisémica):
- especular con bonos, valores bursátiles, petróleo, trigo, centeno, azúcar etc. (típica acepción de la gente guay)
- especular con cosas sofisticadas que nadie entiende: CDOs (pasado de moda), CDSs, warrants, esprehendoiches etc. (superguay)
- adquirir un chamizo para sobar, preparar la cena y refugiarse cuando llueve o nieva. (de uso entre ignorantes y atrasados)
- adquirir un chamizo para colocárselo posteriormente a pringados como los descritos anteriormente (pasado de moda)
- adquirir un chamizo porque se trata de una oportunidad única (de uso entre pepitos y visilleras de bien)
- comprar utensilios y bienes que permitan fabricar algo y venderlo (pasado de moda)
- pagar 100 min. de publicidad en un canal de TV (fashion)
(etc.)
6. empleado: gasto, recurso humano (o humanóide), fuente de problemas, ..
7. Desempleado: haragán, vago, inútil.
8. Desempleado de larga duración: haragán, vago pero útil, porque no gasta y sirve para explicar la necesidad de las acepciones 1. 2. 3. y 4.
9. Fondo de ayuda: dinero que te doy exclusivamente para que me lo devuelvas con intereses.
10. despido libre: sirve para subir los salarios también asegura el pleno empleo. Eso dicen, si señor. ¡Con 2 cojones!
11. Competitividad: el fín último de todas las cosas.
12. Confianza: estado catatónico en el que se queda uno cuando le bajan el sueldo o se le acaba el contrato.
13. Impuestos: yu-yu, demonio, la bicha.
14. Estado: un mal que a veces es necesario. (esta acepción es muy exclusiva, no sabía si debía incluirla)
15. Inmigrante: alguien que siempre debería estar sin papeles. Pueden ser útiles para rebajarles los humos a 6, 7 y 8
16. Sindicalista liberado: comadreja, sanguijuela, rata de cloaca.
17. Apalancancamiento: tomo prestados 100 de 100.000 pringaos y me saco un rendimiento de la hostia. Si me va mal, que me rejcaten.
18. Tickle down: (ing.)Si yo gano 100.000.000.000, algunos céntimos le caerán a los pringaos. Por tanto, para el mundo en general es bueno que yo gane 100.000.000.000.
Leído en Burbuja Inmobiliaria
miércoles, julio 21, 2010
También hay que decir que ...
¿Ha de recortarse el sueldo de los trabajadores de empresas públicas en igual forma que a los funcionarios? No tengo una idea clara al respecto. Lo que sí está claro es que la estabilidad de unos no tiene nada que ver con la de los otros. Quizás me decanto más por la idea de que, a menos que fuese muy necesario, no sería "justo" recortar también los salarios de los empleados de las empresas públicas en igual medida. Pero claro, tampoco es "justo" que un empleado de la misma categoría que otro reciba sueldo diferente. En fin, un lío.